Algunos de los fondos robados a Coincheck Inc. en el atraco de $ 500 millones se remontan a un operador de criptomonedas en Canadá, según el investigador BIG Blockchain Intelligence Group Inc.
Algunas de las monedas NEM robadas se están transfiriendo a una bolsa con sede en Vancouver, donde se están convirtiendo a otras criptomonedas para un posible viaje de regreso a Japón, según Shone Anstey, presidente y cofundador de BIG.
Anstey se negó a nombrar el exchange, dio la cantidad rastreada o su destino en Japón, pero dijo que los hallazgos se entregarán a la policía.
"Sentimos que era una cantidad significativa que justificaba investigar", dijo Anstey. "Están tratando de moverlo antes de que se cierre la puerta, pero hay mucho que mover".
Uno de los aspectos más extraños del atraco es que los fondos virtuales robados se pueden rastrear en línea, porque las transacciones de bitcoin y otras criptomonedas son todas públicas, aunque las identidades de quienes lo envían y lo reciben pueden mantenerse en el anonimato. BIG usó una combinación de información de contabilidad pública disponible para cualquier persona y conocimientos especializados para rastrear las monedas. Coincheck ha identificado y publicado 11 direcciones donde terminaron los 523 millones de monedas robadas.
Más de 24 millones de monedas del atraco han terminado en Zaif, un operador japonés de NEM, según un informe del viernes en Akahata, el periódico publicado por el Partido Comunista de Japón.
Los desarrolladores de NEM han creado una herramienta de seguimiento que permitiría a los intercambios rechazar automáticamente los fondos robados. Las 11 direcciones se han etiquetado con una etiqueta que dice "coincheck_stolen_funds_do_not_accept_trades: owner_of_this_account_is_hacker".
No está claro si Coincheck ha identificado a los ciber ladrones. Coincheck no respondió de inmediato a una solicitud que buscaba comentarios sobre el movimiento de las monedas NEM robadas.
Al menos cuatro de las direcciones asociadas con el atraco han mostrado actividad en los últimos dos días, transfiriendo más de 31 millones de monedas NEM. Varias de las transacciones llevaban un mensaje críptico en japonés incómodo que decía: "Esta compra es para determinar la dirección bitcoin del delincuente, insisten en que el propósito no es para beneficio propio".
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